La coctelería cubana ofrece un sinfín de combinaciones con un toque criollo inconfundible. Uno de sus frutos es el mojito cubano, coctel muy famoso en el mundo entero y que ha logrado ganarse el cariño de todo aquel que ya lo conoce.
No en vano llegan turistas desde todas partes del orbe con una frase que va directo al corazón: «¡Vine a probar el mojito cubano!».
Al navegar en internet puedes encontrar numerosas formas de hacer un mojito cubano, pero no todas las recetas responden a nuestro auténtico mojito.
Para ello, hay que conocer un poco la historia de este coctel, los ingredientes que se utilizan en su tierra cuna y el conocimiento de quienes preparan esta bebida en la Isla. ¡Y es precisamente eso lo que hoy te traemos!
Te invito a que leas este artículo que te hará viajar a Cuba en instantes. Así, podrás aprender a preparar esta esencia nuestra donde quiera que estés.
De draquecito a mojito: el coctel descendiente de un pirata
Cuentan que las raíces históricas de este coctel se remontan al siglo XVI cuando los piratas dominaban la mayor cantidad de puertos y mares en torno a las Antillas y América.
El coctel -o más bien la primera versión de él- se conocía en la Isla como «draquecito». Fue bautizado así en honor al corsario británico Francis Drake por ser el primero en prepararlo. ¿Con qué objetivo? Tanto el capitán como sus intrépidos marineros consumían esta bebida para aliviar males estomacales, combatir el escorbuto (enfermedad causada por la deficiencia de vitamina C) y calmar el intenso calor de las Antillas.
Tiempo después, durante el siglo XIX, la receta original se fue transformando y su nombre cambió de «draquecito» a «mojito». Para ese entonces ya se había descubierto la manera de obtener un exquisito ron refino, lo que sustituyó al rudimentario aguardiente (versión menos refinada del ron).
El coctel se consumía mayormente en los bares habaneros. En las décadas del 20 y 30 fue cobrando mayor popularidad. Miles de turistas de Norteamérica llegaron a Cuba mientras huían de la Ley Seca. Aquí encontraron abundante ron y una gran variedad de cocteles que fue creciendo según el gusto de los sedientos clientes.
El exótico mojito logró incluirse en la lista de preferencia y su alta demanda lo convirtió en todo un clásico.
En 1942 comenzó el auténtico camino a la fama del mojito cubano, nada más y nada menos que en la barra de la conocidísima Bodeguita del Medio.
El local, especializado en la elaboración y venta del mojito, se convirtió en uno de los bares más visitados de la Habana gracias a un importante «empujoncito» que le dio el escritor Hemingway. El famoso literato y asiduo bebedor nos dejó una frase célebre: «Mi mojito en la Bodeguita y mi daiquirí en el Floridita».
Ahora que ya conoces la historia de este coctel tan internacional te preguntarás ¿qué contiene el mojito cubano y cómo se prepara? ¡Aquí te lo contamos!
Receta original del mojito cubano
El mojito cubano es una bebida muy refrescante e ideal para pasar un rato entre amigos o una noche de fiesta. Tómate un mojito tranquilamente y no sentirás nada, tómate unos 4 mojitos y «saldrás por los pies».
Es un coctel aperitivo (pre–dinner), así que, si organizas una reunión, puedes prepararlo para tus amigos mientras esperan a que esté lista la cena. Ahora así, ¡vamos por la receta!
¿Cuáles son los ingredientes del mojito cubano?
Para hacer un mojito cubano se requieren ingredientes frescos y de buena calidad. Necesitarás:
- 1 cucharadita de azúcar de caña
- 7,5 ml de zumo de limón
- 1 o 2 ramitas de hierbabuena
- 45 ml de ron blanco
- 150 ml de agua gaseada
¿Cómo preparar un mojito cubano?
Para preparar esta bebida no se necesita una coctelera. Se prepara en el mismo vaso que se sirve y se remueve con una cuchara mezcladora. Los vasos más adecuados para el mojito son los tubulares (de tubo), aunque también puedes utilizar vasos altos y anchos. La receta que te proponemos es para un vaso de 8 oz y una ración de mojito.
El rol protagónico de este coctel lo juega el ron. Se considera que el mejor ron cubano para mojito es el ron Carta Blanca de cualquier línea (ron Santiago, Legendario, Caney y otros), favorito también para otras bebidas que se preparan a base de ron blanco. Sin embargo, el ron que más se utiliza para mojito en Cuba es el ron Havana Club Añejo 3 Años.
Conoce las marcas insignias de rones cubanos en nuestro artículo: Ron cubano | Todo sobre los rones de Cuba
Tiempo necesario: 1 minuto
Una vez que tengas los ingredientes, sigue este paso a paso donde te enseñamos cómo hacer un auténtico mojito cubano.
- Echa en el vaso una cucharadita de azúcar.
Puedes utilizar azúcar blanca fina. Es difícil disolver azúcar en líquidos fríos, así que, si la azúcar es demasiado gruesa, podrías terminar con un trago arenoso.
Tip: Algunos bármanes prefieren utilizar jarabe de goma en sustitución de la azúcar. Si deseas prepararlo es muy fácil. Se elabora con agua y azúcar como un almíbar, pero con una proporción de 1×1. - Vierte un chorrito de zumo de limón.
Solo lo suficiente para cubrir el azúcar, y revuelve. Si no tienes la habilidad ni experiencia requerida para elaborar cocteles, te recomendamos usar un jagger (dosificador) para echar exactamente 7,5 ml como dice la receta.
- Añade 1 o 2 ramitas de hierbabuena en dependencia del tamaño.
Recuerda lavarla previamente con agua y escurrirla. Evita usar las ramas con hojas dañadas o de color marrón, selecciona solo aquellas que mantengan un color verde uniforme.
Algunas recetas sugieren utilizar para el coctel solo las hojas, ¡error! El aroma y sabor de la hierbabuena proviene del tallo, y no de las hojas, y su aporte es lo que hace distintivo al mojito.
Nota: Aunque en muchas recetas proponen usar menta, ¡las cosas como son! El mojito se hace con hierbabuena y no con menta, la diferencia de sabor es notable. - Macera la hierbabuena con el azúcar y el limón.
Debes hacerlo presionando suavemente y girando el macerador o mortero, como también se le dice.
¡Cuidado! No se trata de triturar ni despedazar la hierbabuena, son solo pequeños toques para extraer su aroma y sabor. Haz lo posible por machacar el tallo y no romper las hojas, si no, al beber el mojito vas a sentir sus trocitos y esto resulta muy incómodo.
Eso sí, trátala con mucha suavidad, de lo contrario, vas a estropearla. Si no tienes a mano un mortero, puedes usar una cuchara de palo o el mango de un rodillo. - Vierte el hielo hasta llenar las ¾ partes del vaso.
Aunque algunos emplean hielo picado, te recomendamos utilizar cubos de hielo. No queremos aportar un exceso de agua que pueda estropear el trago.
- Añade 45 ml de ron.
En este paso sí debes tener cuidado con la medida. Si te quedas por debajo, tu trago sabrá a agua con azúcar y si te pasas con el ron, resultará muy difícil beberlo. Te recomendamos utilizar el jagger para que logres echar la medida exacta.
Tip: Si quieres impresionar a tus amigos como todo un profesional y no utilizar medidor, ¡aquí te dejamos un truco! 45 ml equivalen a 4 segundos bien contados mientras viertes el ron. - Rellena con agua gaseada
Hasta dejar una distancia de 1 cm entre el líquido y el borde del vaso. ¡Asegúrate que no sea agua saborizada!
- Remueve con una cuchara.
¡Importante! La idea no es hacer girar los hielos, sino desprender el azúcar del fondo. Este paso no puedes olvidarlo, pues el azúcar quedará en el fondo y tu trago tendrá un sabor a rayos insoportable.
Si deseas puedes decorar tu coctel con una ramita de hierbabuena.
Coloca un absorbente (pajita, pitillo o como sea que le llames) para beberlo, o no si eres eco-friendly. ¡En este caso puedes optar por uno que no sea de plástico!
¡Listo! Y hasta aquí tienes un mojito original de Cuba.
Si vienes a la Isla tal vez te topes con sitios en donde le añaden algo más. Por ejemplo, unas gotas de angostura como toque final. Esto es un bitter (amargo) que le brinda un equilibrio y un sello a la mezcla distintivo.
Aunque la receta original del mojito no lleva angostura, lo cierto es que le aporta un sabor muy especial y además un toque de color a tu mojito.
En otros lugares, en vez de angostura se le echa un toque de ron añejo. Es otra variante que puede ser un poco más fuerte en cuanto al alcohol pero que también es muy bien acogida.
Tipos de mojitos y recetas
El mojito es un coctel tan popular y consumido que hoy día existen muchas versiones más allá de la receta clásica.
Para conseguir una buena receta siempre hay que partir de la raíz de la misma. Si se conoce bien la base, las variaciones serán más fáciles de integrar. Aquí te proponemos algunas opciones. ¡Échale un vistazo!
1. Mojito frappé
El mojito frappé es muy consumido en los bares de la isla. ¡Prepararlo es muy sencillo! Necesitarás los mismos ingredientes que lleva el mojito auténtico cubano y una batidora, o algún electrodoméstico de función similar. Es una opción muy refrescante. Sin dudas te encantará.
2. Mojito de sabores
Si ya conoces como preparar un clásico mojito casero, ahora puedes dar rienda suelta a tu imaginación. La combinación de frutas frescas es una variante atractiva que le aporta colorido y sabor a nuestra bebida.
Fresa, melón, piña y maracuyá son algunas con las que se hace el mojito cubano saborizado.
Su modo de preparación es muy sencillo también. Solo debes adicionar la fruta que desees junto al azúcar, el zumo de limón y la hierbabuena. Puede ser la pulpa o la fruta en sí, en ambos casos macérala junto con la hierbabuena.
Tip: ¡Un truquito! Si deseas realzar un poco el nivel de alcohol, puedes emplear un licor del mismo sabor que el del mojito que estás preparando. Esto es muy útil en el caso del melón, pues este contiene un alto contenido de agua. ¡Decora tu trago con un trocito de tu fruta!
3. Mojito sin alcohol
Muchas veces hay un niño o alguien que desea permanecer sobrio en el grupo. Si eres tú, no te limites a probar este coctel, también hay una opción para ti. ¡Es muy simple! De los ingredientes que lleva el mojito, elimina el ron y rellena con agua gaseada.
Palabras finales
El mojito es una bebida refrescante, equilibrada e ideal para las tardes de verano. Pero más allá de eso, este coctel tiene una gran tradición histórica y es un símbolo de cubanía donde quiera que se prepare. Es una de las tantas delicias de nuestra tierra que, sin dudas, deberías conocer.
La creatividad en la coctelería cubana ha tenido un constante desarrollo que ha traspasado las fronteras nacionales y ha sido acogida con acreditada aceptación. Por eso te invitamos a que explores este mundo con más profundidad y te dejes cautivar con todo lo que tiene para mostrar.